Timmy. Un reconocimiento a este desconocido superheroe

Han sido unos días especialmente dificiles. En la televisión hablaba de el fuerte incremento del precio del barril del petroleo, de la profundidad de la "desaceleración acomodada de la economía doméstica", también hablaban de guerras, atentados, IPC adelantado ,enfermedades por aquí, incumpliento de presupuestos por allá.......pero,¿que importancia tiene todo esto?
Es cierto que todos estos temas son tan pueriles cuando una desgracia afecta a un miembro tan destacado de tu familia....si.....Timmy, nuestra querida Ninfa sufrio un terrible accidente.
Fue una mañana de un día de Junio...........bueno, seamos fuertes, ese día de Junio fue el pasado día 07. Era una mañana tranquila, y nadie sospechaba la desgracia que sobrevolaba nuestras cabezas. Era la primera vez que íbamos a dejar volar a nuestro amado Timmy en el chalet, una vez nos hemos instalado para pasar el periodo estival. Era en torno a las 09:00 horas de esa fatídica mañana cuando abrí la puerta de la jaula. Timmy se pensó dos veces salir, pues el escenario era nuevo y supongo no tenía la tranquilidad suficiente para emprender el vuelo. Al final, sus alas empezaron a moverse al ritmo celestial que suele hacerlo y su cuerpo remontó y volvió a vencer la fuerza de la gravedad por enésima vez, con esa elegancia tan característica.
Dió una vuelta al comedor, luego otra, y otra... fue entonces cuando me di cuenta que algo no iba bien. Timmy no encontraba un lugar donde posar su fragil cuerpo. Comenzó a rasear por el comedor hasta que se estrelló con dos sillas plegables que estaban apoyadas en la pared. De ahí cayó al suelo, con la mala fortuna que el golpe hizo que las dos sillas perdieran el equilibrio vertical de la pared y cayeran horizontalmente encima de nuestro estimado Timmy. Terrible.

Comenzó a piar de una forma desgarradora, se podía adivinar el sufrimiento que estaba atravesando ese fragil cuerpo. Inmediatamente lo rescatamos entre los amasijos de hierros de las sillas, cual Cuerpo de Bomberos en cualquier película de desastres, únicamene que la tragedia esta vez era real. Comenzó a batir nuevamente sus alas y comenzó de nuevo a volar hasta que se posó en uno de los cuadros que tenemos eternamente pendientes de colgar. Fue en ese instante cuando pudimos ver el alcance del accidente, al contemplar como una pata la utilizaba para apoyarse y la otra miraba en sentido contrario hacia arriba, como recordando a aquel compañero de clase empollón levantando la mano para responder cualquier pregunta del profesor.
De repente, esa hermosa mañana de junio se convirtio en la peor pesadilla imaginable.
Lo dejamos relajarse, dándole y dándonos tiempo para relajarnos , hasta que conseguimos introducirlo en la jaula, y salir urgentemente en busqueda de un veterinario que nos pudiera ayudar. Paula y Vera se quedaron tremendamente asustadas, rezando por la vida de su guía espiritual.
El diagnóstico fue aterrador. Rotura total de la pata izquierda, en una zona muy alta lo que hacía más complicada su buena recuperación. La veterinaria le vendó toda la pata, desde su lindo sobaquito hasta sus frágiles dedos, con esparadrapo y gasa, y le dio en su lindo pico un liquido que resultó ser un antiinflamatorio.
Ahora todo a cambiado, 21 días después Timmy vuelve a ser feliz, y su felicidad arrastra la alegría a nuestra morada. Han sido 21 días durísimos, de sufrimiento y de mucha dificultad para conciliar el sueño, pero después de los 24 euros de la primera visita, de los 20 euros de la segunda más los 50 euros de la multa por dejar mal aparcado el coche, más los 10 euros de la última visita, pudo decir que esos 104 euros no son nada solo con ver esa sonrisa en el pico de Timmy, o ese guiño de ojos que hace al verme. Todo ha valido la pena.

Y pensando ya todo esta dura etapa, y como he titulado esta entrada, nuestro querido Timmy es un pequeño y desconocido super heroe, totalmente comparable a esos Superman, Spiderman....
Analicemos la situación: Timmy puede pesar en torno a 40 gramos y medir alrededor de 15 cm de alto. Las sillas que le cayeron encima podrán pesar fácilmente 2 kg y tener una altura de 1 metro. Es decir, soportó un peso 50 veces el suyo que cayó a una altura de 6,66 veces la suya.
Extrapolando ésta realación a una persona humana con características tan perfectas como la mía , es decir, una altura de 169 cm y un peso de 79 kg (si, lo sé, obesidad grado II), es como si hubiese sobrevivido a un accidente en el que me cayera encima 3.950 kilogramos desde una altura de 11,25 metros.

Impresionante, Timmy, Impresionante.